Sobre activismo y seres de luz



Hace poco decía en una conversación, que me sentía satisfecho como benicarlando, socioculturalmente, porque a lo largo de los años, he organizado eventos en esta ciudad que me llenan tanto de orgullo, como un concierto de Motorzombis, una exposición de Juarma y la presentación del “Saldremos de esta”. 

Y  tras la jornada de este sábado, me hace pensar, por ejemplo, lo que decían en Otra Esquizofrenia Es Posible esta semana, que el movimiento se demuestra andando y que el cambio empieza por un@ mism@; que de nada sirve quejarse sin proporcionar una alternativa o un mínimo camino.

De la suma de los dos párrafos anteriores, deduzco que no soy más que un mindundi y bastante tímido, la verdad, pero que cuando he necesitado escuchar una idea y compartirla, por muy negro que me hayan pintado el proyecto una mayoría, al menos lo he intentado y aunque sea un@s poc@s, se han beneficiado de esas sabidurías. Que vamos, que no es tan imposible eliminar ese artículo de: “yo creo EN un mundo mejor”, si te empeñas.

Y todas estas palabras me vienen a la cabeza ahora, porque hace un par de horas, he dejado en una estación de tren a un alma llena de luz, que much@s idolatramos por su capacidad de trabajo. No solo he conocido en persona a Ana Carralero, si no que he posibilitado que otras personas conocieran el mensaje que, como ella, pocas personas he visto relatar; con la cercanía de quien es cercan@ porque sí y con la comunicación justa: que EL CAMBIO ES IMPARABLE.

Por supuesto, no puedo dejar de agradecer su trabajo a todas las personas que posibilitan las jornadas de EN MI PIEL. Desde luego, a Raquel, que es la otra mitad de este acto. En esta ocasión, a Alicia, por levantar alto el listón desde el primer segundo de esta edición. 
A tant@s otr@s que os habéis acercado a compartir y a tanto ser humano que os acercáis a escuchar y a participar con vuestras preguntas e ideas. Es agradable saber que aunque hagas pocas cosas en la vida, puedan dejar un pensamiento alternativo en otr@s.
Gracias.

Hugo Losina, editor de Fanzkenstain  

Comentarios

Entradas populares